top of page

LA LIBERTAD DE LA MUJER
Primo Rojas 29 de octubre de 2021
Para las personas más jóvenes parece un cuento de horror. Hace apenas 100 años la mujer no tenía ningún derecho. Así fuera suya, por ejemplo, no podía vender su casa. Y si quería comprar una, aun teniendo el dinero, no podía hacerlo. Podía comprar naranjas, unas papas o unas flores en la laza de mercado. Pero no podía comprar ni vender propiedades de finca raíz sin la autorización de su padre, de su esposo, de su hermano mayor o, en ausencia de los tres anteriores, de un tío o el cura párroco que actuaba como guía espiritual de la familia.
LEER MAS
bottom of page