¿DE QUÉ VA?
Esta obra nunca fue diseñada para ser mostrada ante el público. Originalmente era un ejercicio actoral de carácter absolutamente privado. Su propósito era eminentemente didáctico. Sin embargo, unas circunstancias accidentales, lo pusieron en conocimiento del público, y desde entonces ha tenido una aceptación mayoritaria y también algunas críticas. Es un ejercicio del más puro humor negro, y el asunto que lo sostiene es la descripción de cómo un pobre entierra a la mamá. Es una descripción estúpida, grotesca y absurda pero de ninguna manera pretende ofender a nadie. Como todo obra de arte es eminentemente estética y simbólica. No se la puede juzgar desde el punto de vista moral.Compra tus entradas por COP$24.000 Aquí:
Un humor puede perpetuar la estupidez y otro humor puede hacer un llamado a la consciencia sobre la estupidez de ciertas cosas. Uno conoce un humor populachero porque perpetúa la estupidez, mientras que el humor inteligente la pone en evidencia y la cuestiona, y esa operación inteligente produce risa.